lunes, 2 de agosto de 2010

AMOR Y MUERTE, WILLIAM BACCINO

AMOR Y MUERTE


Lloré la pena de no estar contigo,
lloré el silencio de las horas idas,
de dulzuras sabrosas, de deseos,
de placeres logrados y soñados.



Lloré tu piel, suave y sensible,
lejana ya,....muy lejana.
Volví a sentir tu aroma
traído por la brisa nocturna.



Vi entonces,
la dulzura de tu amor
abrazarme nuevamente,
en el silencio de la nocturna soledad.



Volví a tener tus labios en los míos,
tu cuerpo junto al mío,
mis manos acariciando
la dulzura de tu ser.



Volví a sentir la felicidad
corriendo por mis venas,
invadiendo mi cerebro,
golpeando mi corazón.
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Y estabas ahí, junto a mí,
cediéndome tu amor,
diciéndome cuanto me querías.
Entonces...........
en el postrero suspiro de mi vida
lo llevé conmigo, ...hasta la eternidad.

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