CAFÉ LITERARIO LUZ Y LUNA, JORNADA DEL 29 DE AGOSTO, XAVIER DUARTE ARTIGAS, URUGUAY

Estimado William: te envío un poema para el sábado. Mis saludos para tus colegas y en especial para el público de tu tertulia.
Un abrazo de xavier.






CON SU RABITO


I


Como si fuera niño la simpleza de los objetos mi mano busca.
Re inventados éstos por un artista que viene de envejecer,
el cual instala sobre flamante pilar de lo real,
un boceto de bosque,
su callejón contiguo,
que da hacia la fugaz ribera de un río,
junto a la cual nace otro callejón,
tan sólo imaginado por él.


II


¡Ay!
cómo lo mínimo,
con su rabito,
hace fiesta,
fiesta de perro que busca dueño.
Todo lo demás es cuento para aburridos.
En esta sala,
la ignorancia,
te topea con el hombro y a veces,
te da golpecitos,
piadosos golpecitos de sabiduría.


III


En el hueco de los portales que chatos asoman sobre vereda en piedra caliza,
qué parvedad;
basta que mires al otro lado de la calle,
donde en su palacio anida el benteveo,
con albura sobre los ojos…
…y en el corazón;
la intensidad del amarillo viene hacia ti,
como si nunca hubiera habido amarillo en el nido del benteveo.


IV


¡Ay!
qué parvedad,
bastan 4 0 5 movimientos y se gastó el recuerdo.
Es un reino caprichoso el reino de la memoria,
poca cosa es con sequía,
el exceso de lluvia la pone en serios aprietos.


V


Cómo se olvida uno del lugar,
la almohada,
el levantarse y así,
sin escarpines,
meter el alma en los bigotes de la chancleta,
como si fuera saliva distribuyéndola,
en pinceladas,
sobre el bisel de un espejo inexistente.
En su huida,
tan sólo le puedes ver un esbozo de nalgas,
que se adelgazan,
pues ella huye por epitafios,
copas de árboles,
leño que asoma,
hierba que emerge de su escondite,
cal despegada del muro aquel,
que delimita lo apretujado en cementerio israelita;
hacia los fondos de un caserío,
polonés que se ha dormido,
vuela tu alma;
en busca de su saliva sobre la mínima piedra de mármol,
junto a la cual,
un perrito mueve su rabo,
buscando dueño.