OCASO
Tu indiferencia me agobia
me preocupa, me obsesiona.
Tu arrogancia me lastima,
me hiere, me decepciona.
Tu orgullo me confunde,
me inhibe, me desanima.
Pero igual...
Yo te escribo versos
que nadie lee
y te digo palabras
que nadie escucha.
E invento frases
que nadie entiende.
Y te doy amor
que tú rechazas.
Detente en el camino
y piénsalo con calma.
Acepta la ternura
que desborda el alma.
Llena mi noche de besos
hazme ver el alba.
Camina por el sendero
que te guía hasta mis brazos.
Enciéndeme con tu fuego
que ya estoy en el ocaso.
DIME AMOR
Para que tú me veas como yo quiero que me veas, es que
ensayo mi mejor sonrisa.
Para que tú me oigas como yo quiero que me oigas, mis
palabras se adelgazan y estilizan para tocar tu oído.
Para que tu me ames como yo quiero que me ames,
imagino hay una ventana abierta que me muestra un rostro: el
tuyo y que juego con tu pelo y me pierdo con la inmensidad
de tus ojos. Me rescata tu boca y me dentengo en ella, me
deleito en ella lentamente, borde a borde, recorriento y
descendiendo por cada milímetro de tu piel, que me fascina y
me enloquece.
Imagino que descubrimos juntos un mundo diferente en
esta loca, loca, aventura de amarte. Que recorremos juntos
caminos no recorridos. Que soy lo que tu imaginación quiere
que sea; que vives conmigo las pequeñas cosas que
componen mi vida. Como una caricia, un silencio, un poema,
un beso, una lágrima, un dolor.
Si los comparto contigo, mis días son tendrán veinticuatro
horas y serán una prolongación infinita del tiempo, un tiempo
que será hermoso, si lo recorremos juntos.
Para tí sólo para tí, hay un lugar en mi corazón, el que te
hablará en silencio, el que le pondrá música a los besos y hará
que las notas musicales dancen ante tus ojos.
Para que tú me ames, seré dúctil, maleable, para que me
amoldes a tu gusto y medida.
Para que tú me ames, seré frágil gacela qeu emprenderá
veloz carrera hacia tus brazos.
Para que tú me ames......
Dime, amor...¿Qué debo hacer para que tú me ames......?
AMOR
Déjame mirarte sin testigos.
Déjame amarte sin barreras.
Déjame darte mi abrigo.
Quiero amarte sin fronteras.
Quiero encontrarte una noche
sin tiempo ni despedidas,
no escuchar ningún reproche.
Solo el beso de bienvenida.
Quiero encontrarte una noche,
sin tristezas, solo alegrías,
que tu amor, quite las penas,
las penas del alma mía.
Déjame expresarlo de algún modo.
Déjame decirle lo que siento.
¡Te amo....! Y ese amor nació,
del alma, en un momento.
Deja que murmure la gente.
Deja que el mundo se asombre.
Tengo urgencia por tenerte.
Si esto no es "Amor".
Ponele vos el nombre.
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